Esta mañana, mientras me preparaba un café bien caliente, me he dado cuenta de que el frío porfín ha llegado. Personal mente me gusta el frío, me encanta salir a la calle y sentir aire frió en la cara a primera hora de la mañana, es un recuerdo que tengo muy asociado a mi niñez,a las frías mañana cuando iba de camino al colegio.
Recordando por un momento mi niñez, no pude sino darme cuenta del cambio brusco de temperaturas que hemos tenido en apenas un par de semanas, y con ello, vino rápidamente a mi cabeza el mito del rapto de Pérsefone. Así que, con un buen café en mano vamos a ello.
Perséfone era la hija de Zéus y Deméter( llamada Ceres en la religión romana, diosa de la agricultura) un día que Perséfone estaba recogiendo flores, Hades el dios del Inframundo la vio y se enamoro de ella. Hades decidió raptar a Perséfone y llevarla con el al Inframundo para convertirla en su reina, cuando Deméter se entero de lo ocurrido la desesperación la consumió, vagaba por todo el mundo en busca de su hija llorando y gritando. Zéus no pudo soportar mas la desesperación de Deméter, ordeno a Hades que devolviera a Perséfone a su madre. Hades acepto pero con una condición: Perséfone pasaría unos meses en la tierra con su madre y después volvería al Inframundo con él ( y así hasta el fin de los tiempos) .
Por tanto, este es el mito cuenta el cambio de las estaciones: cuando Deméter y su hija estaban juntas, la tierra florecía de vegetación(Primavera y Verano). Pero durante seis meses al año, cuando Perséfone volvía a los infiernos, la tierra se convertía de nuevo en estéril (Otoño e Invierno).
Espero que os haya gustado este precioso mito del cambio de las estaciones, es uno de los mitos que me transportan otra vez a mi niñez, como el frío.
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